miércoles, 16 de noviembre de 2011

LA SELVA PRIVADA

De pronto, las cabezas giraron asustadas, al ver la sombra descalza que provenía del montón de arena a flor de agua, su mirada seca parecía empujar sus pies hacia el liquido salado, su pelo encanecido desafiaba al viento que descubría sus facciones y la mueca de su boca enmudecida.